Tras llegar a Kuala Lumpur y descansar en el hotel cerca del aeropuerto, al día siguiente,cogeremos un vuelo hasta Medan, la ciudad más importante de Sumatra. Seguido, en transporte privado, llegaremos hasta Bukit Lawang, un pequeño pueblo a la orilla del río en el que se pueden ver, ni más ni menos, que orangutanes en libertad. Como esto no es un zoo, siempre habrá la posibilidad de que nos quedemos sin verlos, pero es algo bastante improbable. También se puede hacer un trekking por la selva de unas horas. Y para divertirnos y refrescarnos del calor asfixiante, nada como un descenso por el río en unos neumáticos hinchables.

De vuelta a Medan, al día siguiente, cogeremos otro vuelo con dirección a Banda Aceh. Esta ciudad es tristemente conocida por el tsunami que asoló todo el sudeste asiático en diciembre de 2004. Allí seremos testigos de la magnitud del desastre que causó. Aunque lo que nos llevará hasta Banda es cruzar en ferry a una de las islas con uno de los fondos marinos más increíbles del mundo, Pulau Weh. Si queremos hacer un curso de submarinismo este será el sitio ideal y si somos aventureros y nos animamos a alquilar una moto, descubrir los recónditos paisajes de la isla será muy estimulante.

Con la emoción de un niño con zapatos nuevos después de haber visto lo visto, nos volveremos a Banda Aceh y a Medan otra vez en avión, ya que los desplazamientos por tierra llevan mucho tiempo y de eso por desgracia andamos un poco escasos.

Según bajemos del avión, nos estará esperando un transporte privado para acercarnos hasta el Lago Toba. Serán solo 210 kilómetros, pero nos llevarán más de 6 horas y media el hacerlos. Este es un lago volcánico más grande que Singapur y con una isla en medio. Lo habita la etnia Batak cuyas casas tradicionales se caracterizan por su decoración colorida y sus techos curvados.

A partir de aquí y siguiendo hacia el sur, llegaremos hasta Singkil para coger un barco que nos llevará hasta las Islas Banyak. Se podrían definir como el paraíso en la tierra. Nosotros dormiremos en dos, Pulau Tailana (escasa media hora en darle la vuelta) y Pulau Sikandang (un poco más grande, 2 horas en rodearla), pero podremos hacer excursiones en barcos locales a las islas cercanas. El alojamiento son bungalows básicos en la misma playa con un pequeño porche. Los baños son compartidos por lo que tenemos que ir con ello sabido de antemano. Aunque puedo asegurar que teniendo el paraíso para nosotros solos, (no hay más alojamientos), eso será algo que pasará a un segundo plano. Allí tendremos las tres comidas incluidas, ya que es imposible ir a ningún otro sitio a comer, a no ser que nos hayamos adaptado perfectamente al medio y seamos capaces de pescar y cazar para hacernos nuestra propia comida.

Tras disfrutar de ser unos Robinsones en el Índico, tendremos que deshacer el camino andado y volver hasta Medan para al día siguiente coger un vuelo a Kuala Lumpur, en donde podremos pasear por una de las ciudades más modernas y limpias del sudeste asiático y subir hasta, el que hace no mucho, fue el edificio más alto del mundo, las Torres Petronas. Habrá que aprovechar a hacer las últimas compras y con una sonrisa sempiterna montarnos en el vuelo de regreso a casa sabiendo que algo se ha removido en nuestro interior.

Esquemáticamente, este será nuestro itinerario: